Aunque no soy seguidor de los deportes televisados no puedo dejar de manifestar mi opinión( pa eso tengo un blog) sobre la noticia de que Pepu hernandez vaya a ser destituido como seleccionador de baloncesto.Resulta increible que se pueda tratar de esa manera a alguien que ha conseguido llevar en nombre de España tan lejos, que se prescinda de un auténtico campeón que ha hecho las cosas de una forma inmejorable,desde una postura de discrección y humildad loable en cualquier persona, más aun en un entrenador de su nivel. En las antípodas tenemos al mal llamado sabio de Hortaleza, Luis Aragonés, una persona( yo aun tengo mis dudas de si estará emparentado o no con el malogrado Copito de Nieve) que en una larga vida dedicada al futbol como entrenador no ostenta en su haber más que una liga, eso en 34 años lo que a mi parecer es un bagaje escaso como para denominarlo Sabio.Pues el caso es que este señor con edad de ir a jugar al dominó al bar o pescar truchas se dedica a entrenar y dirigir la selección española de futbol, cosa que hace lamentablemente mal, pero ni se va ni tampoco lo echan.
Yo después de ver cosas semejantes no puedo menos que preguntarme si esto no es un fiel reflejo de nuestra sociedad, donde se premia cualquier cosa antes que el talento , la humildad y el trabajo, que son sin duda los pilares sobre los que se asienta el exito y la prosperidad.Gana más dinero ( lo que redunda en mayor calidad de vida) un gran hermano o un comentarista/tertuliano/cotilla de cualquier programa que un buen trabajador que madruga y realiza diariamente tareas en beneficio de los demás.Con los politicos pasa lo mismo, los hay muy malos y sin embargo no los mueven de sus escaños, mientras que gente con buenas ideas y mucho más válidas ven como su talento de desaprovecharealizando trabajos mal pagados.Resulta triste y desalentador pero el refrán no se esquivoca:A quien Dios le da martillo, del cielo le caen los clavos.
martes, junio 03, 2008
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